Otro Año Más...
Como verán, otro año se nos ha ido, lleno de alegrías, tristezas, decepciones, enamoramientos...
Muchos, claro, se decepcionaron a ellos mismos no cumpliendo sus promesas, promesas que vagamente quisieron cumplir; tal vez el dejar de tomar, el ponerse a dieta, el dejar de fumar, el ser una mejor persona... promesas que están hechas para romperse. Yo en cambio nunca me prometo algo, pues sé que no lo cumpliré, sólo me digo a mí mismo, que seas el mismo de siempre, no cambies en lo más mínimo, y vaya, creo que no he cambiado.
En tanto a mi manera de pensar, me sorprende mucho, pues no pienso igual que al inicio de este año que termina, tal vez eso se deba a que estoy creciendo, la verdad no sé..
Y vaya, amigos que vienen, amigos que van; amigos que se pensaba que durarían de toda la vida, pero ahora ni la cara se pueden ver; amores que creían para siempre, ahora terminan con sólo una desilución, con un enorme vacío, pues pensaban que era otra persona. Personas que cambian, para bien o para mal, que no son las mismas de siempre, las que conociste cuando eras pequeño y tu mundo era perfecto; es difícil pensar cómo alguien puede cambiar tanto, y dejarnos de hablar, personas que se vuelven ególatras, hipócritas, envidiosas... y todas esas alegrías y tristezas que se pasaron junto a esa persona, sólo quedarán mas que en la memoria, y pronto el en olvido, recuerdos que nunca queires que desaparezcan, momentos llenos de alegría, buenos ratos...
Ahora pues, con el amor, personas que van, personas que vienen; se dejan de hablar y como si nada hubiera pasado. Y claro, hay secuelas de las personas que hicieron daño, un daño irreversible, que al vez el tiempo ayude a sanar...
Y se preguntarán si soy el mismo de siempre, pues no, he cambiado, y creo que para bien. Y con respecto a mi fe, yo ya sólo creo en un Dios, el catolicismo, budismo, judaísmo o cualquier otra religión no me importan, sólo hacer en lo que yo crea que es correcto, sin pensar en qué me dirán las demás personas, no me considero ateo, pues pienso que hay alguien muy superior a nosotros; y bueno, no dejarme engañar con las falsas promesas de algunas religiones, se supone que yo soy católico, pero me han surgido dudas que no he podido responder, y eso ha hecho que poco a poco, deje de creer un poco... Me siento una nueva persona, con otros pensamientos, y otro tipo de fe...
Espero que el año próximo sea un buen año, que las cosas no cambien tanto como este, pero tendrán que cambiar, para bien o para mal, sólo espero conservar a mis mejores amigos para toda la vida...
Carlos